HIFU - FacialDefy 5.0, máquina de belleza HIFU SculptTech, lifting y reafirmación profesional para rostro y cuerpo.
Código de Producto: FY18.0045EU
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HIFU son las siglas de «High-Intensity Focused Ultrasound» (ultrasonido focalizado de alta intensidad). Se trata de un tratamiento en el que se envía ultrasonido concentrado a las capas más profundas de la piel, lo que genera calor de forma específica y estimula la producción de colágeno, consiguiendo un lifting visible sin cirugía.
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Este dispositivo se puede utilizar tanto en el rostro como en el cuerpo, por ejemplo, en el mentón, el cuello, las mejillas, el escote, los brazos, el abdomen y los muslos.
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Muchos usuarios informan de resultados visibles después de un solo tratamiento, pero dependiendo del tipo de piel y del objetivo deseado, puede ser conveniente una segunda sesión.
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La duración depende de la zona tratada: un tratamiento facial suele durar entre 30 y 60 minutos.
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Muchos describen la sensación como un ligero cosquilleo o calor. A intensidades más altas, puede producirse una sensación «similar a un pinchazo», lo cual es normal y varía según la persona.
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Después del tratamiento, puede aparecer temporalmente enrojecimiento, hinchazón o una ligera sensación de presión; estas reacciones son completamente normales y suelen desaparecer rápidamente. Además, el HIFU no es adecuado si hay implantes metálicos o de silicona o un marcapasos en la zona tratada.
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La regeneración del colágeno se produce a lo largo de varios meses, por lo que el resultado suele mejorar en un plazo de 2 a 3 meses. Con un buen cuidado de la piel y un estilo de vida saludable, el efecto puede permanecer visible hasta 1 o 2 años.
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Sí, el HIFU también se puede utilizar para reafirmar el cuerpo, por ejemplo, en los brazos, el abdomen, los muslos o el escote. En comparación con HIFU 1.0, 2.0 o 3.0, la versión 5.0 también permite tratar una mayor variedad de zonas del cuerpo para un contorno corporal más específico.
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HIFU es uno de los métodos no invasivos y, si se utiliza correctamente, es muy seguro. Es importante que el dispositivo disponga de un control preciso de la energía para evitar el sobrecalentamiento o las quemaduras.