Como hombre de cuarenta y tantos años, siempre he prestado especial atención a mi piel facial. Tengo una buena rutina de cuidado facial y he usado productos estupendos a lo largo de los años con resultados variables. Sin embargo, este es mi primer intento de usar un dispositivo específico para reducir arrugas.
Antes de usar el producto, investigué a fondo. Vi muchos vídeos en YouTube y leí revistas sobre microneedling para asegurarme de saber exactamente qué quería conseguir.
El concepto es que las microagujas penetran en tu piel para que el calógeno atrapado pueda fluir hacia la superficie de tu piel. Creo que es una especie de truco, pero se utilizan los propios químicos del cuerpo para lograr un gran resultado.
El dispositivo viene con todo lo que necesitas para empezar. Cargador, cartuchos de aguja, cables, todo incluido. Las instrucciones son satisfactorias porque te dan consejos sobre cómo usar el producto, pero poco más. También me interesaba la ciencia detrás de ello.
En el primer intento, decidí no profundizar tanto. Penetré aproximadamente dos tercios de la profundidad total. Al día siguiente mi piel se sentía tirante, sin sangrado porque las microagujas son demasiado finas. En los días siguientes, mi piel empezó a descamarse un poco, así que empecé a exfoliarme y, tras unos 5 días, volví a mi rutina habitual de cuidado de la piel. Después de una semana, mi piel se veía realmente radiante. Tanto que empecé a recibir cumplidos sobre mi piel.
Tras 5 semanas hice una segunda ronda de tratamiento. En esta ocasión, ahora que tenía un tratamiento, permití que las agujas penetraran aún más profundamente en mi piel que antes. Al día siguiente volví a sentir una opresión y un poco de dolor, la aguja es muy dura y no espero profundizar la próxima vez.
Ahora han pasado unos 7 días desde la segunda sesión y veo que mi piel está aún mejor que antes. Esto ahora forma parte de mi tratamiento habitual para la piel y creo que Dr. Pen es en realidad un producto profesional.
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